Cuenta de instagram sobre Dnd
by Ana Longueira @analongue
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Llevo una cuenta como bitácora de partidas del juego de rol Dungeons and Dragons que juego con mis amigos.
Las imágenes las hice con Midjourney.
Narré el último encuentro y le pedí a ChatGpt que me lo mejore con un tono épico. Tuve que resumirlo y cambiar unas cosas. Este fue el resultado:
Nuestros intrépidos aventureros se hallan cara a cara con la oscura amenaza que es Yayapupu, la poderosa bruja, y sus formidables golems de piedra. La magia danza en el aire como estrellas fugaces cuando el hechicero conjura bolas de fuego que iluminan la negrura de la noche. El fuerte bárbaro, despiadado, blandiendo su hacha colosal, se enfrenta a los imponentes golems, mientras el astuto ladrón, un fantasma en la sombra, desliza sus flechas con puntería mortal.
En este frenesí de batalla, el monje, un torbellino de golpes veloces, desata su habilidad marcial, mientras la druida, con un vínculo ancestral, se transforma en un lobo gigante que se abalanza ferozmente sobre la bruja Yayapupu. La malévola hechicera, risueña y llena de malicia, desata su magia oscura, tejiendo un velo de peligro que amenaza con consumir a nuestros héroes.
Yayapupu, junto a sus colosos golems, somete a la cofradía, llevándolos al filo de la muerte. Pero esta cofradía se niega a sucumbir. Con un esfuerzo titánico, logran doblegar a la bruja, y al caer ella, los golems, testigos inertes de su maestra, vuelven a la frialdad de la piedra.
Haru, con determinación imperturbable, extrae el peculiar collar del cuerpo inerte. Mientras tanto, Liezzar y Krukdug, deciden poner fin a la amenaza de Yayapupu decapitándola, bajo las fuertes protestas del monje, cuyo código ético se ve desafiado por semejante violencia.
Tras curar sus heridas y recobrar fuerzas durante un breve descanso, prosiguen su viaje. Con la brújula de Razziel como guía, emprenden su camino siguiendo la vera del río.
Descubren con asombro que han retornado al mismo recodo donde se cruzaron con los Aldani, aunque ahora están en la orilla opuesta del río. Cruzan las aguas con determinación y vislumbran a lo lejos la roca flotante con forma de corazón que marca su próximo destino. Sin embargo, su alegría se ve interrumpida cuando los Aldani, como sombras en la penumbra, vuelven a rodearlos.
Con maestría persuasiva, Liezzard logra convencer a los Aldani que su propósito es noble. Aunque la desconfianza persiste en sus ojos, los Aldani, finalmente permiten que nuestros aventureros continúen su marcha hacia lo desconocido.

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